Doctora Miriam Quiñones

Especialista en Obstetricia, Ginecología y Medicina Estética

Nada me hace más feliz que sentir que mis pacientes confían en nuestro trabajo. Solo por ello vale la pena seguir mejorando día tras día para dar el mejor de los servicios.

Llegué a Gran Canaria en 2005 y desde entonces trabajo como lo que soy: Médica Especialista en Obstetricia y Ginecología. En el 2018 terminé exitosamente un Máster en técnicas avanzadas de Estética y Láser. Mi trabajo lo he realizado siempre en el ámbito privado, inicialmente en los dos centros más grandes y reconocidos del Sur de la Isla. Sin embargo, desde hace unos pocos años no tengo más jefe que mi propia exigencia en atender de la mejor manera las necesidades de mis pacientes.

La inquietud por la Estética en general surgió para mí en los últimos años; de allí que me animara a hacer el Máster de «Técnicas Avanzadas en Estética y Láser» en la Universidad Cardenal Herrera en Valencia. Esta formación y mi experiencia como cirujana (los ginecólogos andamos «con el bisturí en la mano») me han permitido ampliar mi línea de trabajo. Ahora empleo con alegría y entusiasmo buena parte de mis horas laborales en embellecer tanto externa como íntimamente a las pacientes que me lo requieran. Así y disculpándome por dejar, por una vez en mi vida, de lado la modestia, puedo decir que en Clínica Vecindario realizamos cirugías que aportan mucha comodidad íntima y también logramos niveles muy altos de satisfacción en estética facial y corporal.

Para ello tengo por bandera la obligatoriedad de vivir en constante formación, pues la Medicina es dinámica y como en todo, hay que ir actualizándose admitiendo, con humildad, que nunca tendremos la verdad absoluta en nada. En este recorrido he obtenido una amplia experiencia en el cuidado de la salud femenina y fetal, cuando se trata de las embarazadas y, aparte de los principios netamente médicos, me ha ayudado la disposición a tratar de individualizar las inquietudes y posibles soluciones para cada una de las pacientes que acude a mi consulta.

El ejercicio de la Medicina ha cambiado mucho y no siempre para bien; yo soy médica por vocación y me niego a renunciar al principio fundamental de cuidar de los otros con respeto y procurando siempre la mejor opción para cada paciente; valga esto tanto como para una especialidad clásica, como es la Ginecología, como para la Medicina Estética, que parece frívola pero a la que cada vez más se le reconoce un valioso papel en la recuperación de la autoestima y el ánimo cuando decaen.

Espero y deseo que nuestras pacientes sigan encontrando nuestro centro clínico como un lugar de confianza, cariño y profesionalidad.